Yo quiero ser DADAISTA

La única regla que rige el mundo para los dadaístas es el AZAR, la casualidad, como única ley que rige el mundo. El mundo real no tiene sentido y solo la casualidad es la que decide. Querían demostrar que las leyes con las que regimos nuestras vidas en el fondo son leyes estériles y puros azares. Son juegos, por eso al final, el juego, se convierte para los dadaístas en lugar por excelencia de la reflexión, el juego es un lugar en el que uno se da unas normas, unas reglas artificiales que tiene que seguir si quiere jugar, pero sabe que son artificiales y que las puede abandonar en cualquier momento. Esas normas no rigen la vida. Vivir la vida como un juego al que tu le has puesto las normas y que tu contrincante sea simplemente el destino

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